Translate

sábado, 26 de enero de 2019

Vuela alto y sin miedo


Cuenta la leyenda, que en un lugar no muy lejano, un pequeñín de dos años, se cayó en un pozo muy profundo y oscuro.
El niño, asustado, se echó a llorar, cerrando sus ojitos con miedo.
Fue en ese momento, cuando sintió que unos brazos muy menudos lo sujetaban...
Al abrir sus pequeños ojos, vio a un angelito que con voz amorosa le decía:
"Hola cariño, soy tu hermanito, y he venido a rescatarte,
no tengas miedo hermanito, yo estoy aquí, contigo, para cuidarte".
El niño abrazó fuertemente a su hermano, y tal fue el consuelo que encontró,
que se quedó profundamente dormido en sus brazos.
Ahora los dos juegan juntos en el cielo, entre nubes y arco iris.
Cuenta la leyenda, que una luz de esperanza iluminó los corazones del mundo,
esa lucecita, es una estrella que ahora brilla con fuerza en el firmamento.

Derechos de autor -CC by-nc-nd 4.0 -Rocio FM

miércoles, 23 de enero de 2019

Así es la vida


 A veces, lo inesperado, es lo mejor que te puede pasar.
Los mejores momentos son aquellos en los que sonríes sin darte cuenta. 
 Las mejores fotos son las que se sacan distraído.
Las mejores salidas son las que no se planean. 
Los mejores besos son los robados,
los mejores abrazos son los que te pillan por sorpresa.
Las mejores relaciones empiezan de la nada,
las mejores amistades llegan en momentos que nunca imaginaste.
Las mejores cosas pasan por casualidad,
cuando menos te lo esperas, sin pedir nada, lo recibes todo.
A veces en quien menos crees, es quien más te enseña,
 y a quien menos le das, es de quien más recibes. 
Donde menos buscas, es donde más encuentras,
y de quien menos esperas es quien más te entrega.
En quien menos piensas, es quien más te recuerda,
y a quien menos amas es quien más te perdona.
A veces, quién menos dice quererte, es quien más te demuestra que te ama.
Y cuando menos te lo esperas, la vida te sorprende.

El tiempo, nuestro mejor aliado


Un día entiendes que el tiempo no es enemigo, y que él es nuestro mejor maestro.
Que todo llega en el momento que debe venir. 
Que no sirve de nada patalear ni esconderse de la vida.
Que la fuga no es la mejor salida, y que a final de cuentas, la gente siempre termina agradeciendo todo lo que pasó, porque el tiempo está siempre a nuestro lado,
para mostrarnos lo que realmente vale la pena.

La grandeza de las pequeñas cosas


No sé si serán los años,
pero he bajado el volumen de lo que escucho y he subido el de lo que siento.
Me estremece un atardecer, el sorbo de un buen café, una grata compañía, una bonita canción, una buena lectura frente a la chimenea, el chasquido de la leña al arder, el sonido de la lluvia al caer, el olor a tierra mojada después de varios días sin llover, la belleza del arcoíris, la magia de la luna, el esplendor del otoño, el encanto de la nieve cubriendo de blanco cada paisaje, el florecer de la primavera, el aroma de las flores, el susurro de las olas del mar, el canto de las aves, la sonrisa de los niños, el decir de una mirada, el calor de un abrazo, el poder de un beso...
No sé si serán los años, los daños, o quizás, sólo quizás,
empiezo a ver la vida tan bella como realmente es.